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¿No sabes por donde empezar para hacer un huerto en casa? Sigue esta guía y en un par de meses estarás cenando ensalada de tu propio jardín.
Si estás buscando entrarle a la onda sustentable, buscas cambiar tu alimentación por algo más orgánico, o simplemente quieres ampliar tus habilidades jardineras, la opción de construir un huerto casero es un magnífico proyecto para ti.
Puede parecer algo intimidante, sobre todo para aquellos como yo, que no hemos tenido mucho contacto con el mundo campestre, más allá del fin de semana de cabañas.
Los que hemos vivido la mayor parte de nuestra vida en grandes ciudades, por lo regular no tenemos mucho espacio abierto y las áreas que tenemos con suelo disponible son pequeñas jardineras en el patio o al frente de la casa.
Sin embargo, como todo, con buena disposición y dedicación de nuestra parte, pero sobre todo, apoyado por esta guía práctica para armar un huerto urbano en tu casa, podrás lograrlo fácilmente.
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Ventajas de tener un huerto en casa
Es una realidad que hay una tendencia creciente por prestar más atención a nuestros hábitos de consumo y su impacto en el ambiente.
Se utilizan una cantidad masiva de recursos para cultivar, procesar, empaquetar y transportar nuestros alimentos con un impacto considerable en el ambiente.
Además, a medida que los procesos productivos han ido evolucionando para ser más rentables, los alimentos que comemos tienen cada vez menos calidad nutricional.
Los beneficios de tener un huerto en casa son muchos, por ejemplo:
En la salud:
- cultivando en casa acortamos todo este ciclo productivo, comiendo productos más frescos,
- controlando los químicos usados durante el cultivo podemos obtener alimentos más nutritivos y libres de contaminantes,
- practicando la jardinería nos acerca a la naturaleza y esa conexión nos ayuda a relajarnos, bajando el estrés del día a día.
- y finalmente, puedes ver un beneficio en el bolsillo al reducir el gasto en despensa.
En el impacto al ambiente:
- al lograr cultivar una parte de nuestros alimentos y fomentar el autoconsumo, ayudamos a reducir el impacto generado por todo el proceso industrial, reduciendo, por ejemplo, las emisiones de los gases de efecto invernadero que se generan durante la transportación,
- podemos aprovechar los residuos orgánicos de la casa reutilizándolos como composta,
Y finalmente, puedes ver un beneficio en el bolsillo al reducir el gasto en despensa.
Claro está que un huerto ecológico es un proyecto de largo plazo que requiere de tiempo y compromiso, pero definitivamente, es un primer gran paso para llevar una vida más saludable y sustentable.
Si estás listo, empecemos.
Paso #1: Elige la ubicación para el huerto en casa
Dónde hacer un huerto en casa
Comencemos por aclarar que un huerto urbano lo puedes construir en cualquier espacio de tu casa.
En el patio, en la terraza, en un balcón y por supuesto, en cualquier espacio disponible en tu jardín.
Hay una gran cantidad de opciones para aquellos que quieren un huerto casero, por lo que si buscas como hacer un huerto en casa con poco espacio, lo puedes construir haciendo uso de:
- Contenedores o macetas,
- mesas de cultivo,
- estructuras verticales que te permitan hacer uso de las paredes o espacio vertical,
- y cualquier otro material que pueda ser reciclado para este uso.
Si tienes terreno o suelo disponible en el jardín:
- puedes designar un espacio para el cultivo,
- o hacer uso de mesas o cajas de cultivo.
Comúnmente y por practicidad, sobre todo en el caso de los huertos domésticos, se recomienda construir el huerto en macetas o mesas de cultivo.
El huerto en contenedores es la opción más práctica para la casa, resulta más fácil de mantener y es más sencillo protegerlos de las inclemencias del tiempo.
Ahora, habiendo repasado las alternativas para montar un huerto en casa, hay que elegir la ubicación ideal en función de dos elementos importantes: luz solar y acceso al agua.
Luz Solar para el Huerto
El espacio debe contar con luz natural directa la mayor parte del año, y preferentemente que esta sea luz de la mañana.
Puedes cultivar algunas hierbas en sombra, pero la gran mayoría de las hortalizas y verduras requieren de algunas horas de sol.
Observa durante el día que zonas de tu casa reciben mayor exposición al sol, y qué áreas son de sombra.
Acceso a agua para riego
Es importante contar con una toma de agua cercana. Probablemente en un inicio tengas que regar manualmente y más adelante, en función del presupuesto, puedas considerar algún sistema de riego automático o algún sistema de riego por goteo casero.
Una vez que revisaste los espacios de tu casa, decide en qué áreas de tu casa puedes cultivar y tenlo en cuenta para los siguientes puntos.
Paso #2: Consigue los materiales necesarios
En función de las condiciones de tu espacio que dispones podrás necesitar abastecerte de lo siguiente antes de arrancar tu proyecto de huerto en casa.
Contenedores para el huerto en casa: Tipos y Características
Como veíamos, las opciones de recipientes para plantar dependen de tu espacio, presupuesto y gusto.
Algunas opciones puede ser:
- Macetas y maceteros,
- jardineras
- huacales
- mesas de cultivo
- bolsas
- y cualquier otro material que pueda ser reciclado para este uso.
Cuida que los recipientes:
- Tengan la profundidad necesaria para dar espacio a las raíces de crecer. Considera:
- Para plantas de raíces cortas, se requiere una profundidad de por lo menos 20 cm o un volumen de poco menos de 5 litros.
- Aquellas más grandes, de raíces largas, pueden requerir de entre 40 – 50 cm de profundidad o volúmenes superiores a los 15 litros.
- Se recomienda y además de que cuenten con un agujero para el drenaje adecuado. El exceso de agua es uno de los errores más comunes entre los principiantes de la jardinería, por lo que es muy importante que el contenedor tenga las condiciones propicias para el drenaje, sobre todo si se trata de un recipiente reciclado.
Herramientas de trabajo en el huerto
Es importante contar con algunas herramientas básicas para trabajar con la huerta en casa y realizar algunas tareas importantes de cuidado y mantenimiento.
- Pala, para cavar y remover la tierra.
- Palita de mano, para facilitar remover la planta y sus raíces, y hacer huecos en la tierra.
- Rastrillo, para remover maleza o simplemente airear la tierra.
- Tijeras para podar, para retirar zonas dañadas o maltratadas de la planta con precisión.
- Regadera o manguera, para aplicar el riego necesario.
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Paso #3: Selecciona el sustrato y abono ideal para huerto en casa
Las plantas toman de la tierra la mayoría de los nutrientes que necesitan para vivir. Y para el caso del huerto en casa, la opción ideal, es optar por sustratos, en lugar de la tierra normal del suelo del jardín.
Los sustratos son tierras de cultivo preparadas con materiales orgánicos e inorgánicos que en combinación aportan:
- los nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas,
- el balance adecuado de absorción y drenaje de agua,
- la permeabilidad suficiente para asegurar el paso del aire a las raíces.
Un buen sustrato para el huerto urbano es una mezcla compuesta por algunos de los siguientes componentes:
- Materia orgánica:
- Compost o composta (aporte de nutrientes esenciales)
- Humus de lombriz (ayuda con la porosidad del sustrato, y por lo tanto a la permeabilidad del agua y aire)
- Guano o estiércol de animales de corral (aporte de nutrientes esenciales)
- Fibra de coco, o coco en trozos (da esponjosidad, ayuda a la permeabilidad)
- Corteza de árboles (hojas, restos de plantas)
- Turba rubia y negra de musgo (material fósil)
- Cáscara de arroz (da soporte y porosidad al sustrato)
- Materia inorgánica:
- Tierra vegetal (la del campo, del suelo)
- Perlita, vermiculita, (rocas minerales que evitan la compactación)
- Gravilla (ayuda con la permeabilidad del sustrato)
- Arena de río (favorece la retención del agua)
Aquella combinación con mayor porcentaje de materiales orgánicos, se considera un sustrato de mayor calidad.
Sin embargo, la mezcla perfecta no existe, puedes encontrar muchas combinaciones para diferentes usos y necesidades.
Lo más sencillo para arrancar con el huerto en casa es usar un sustrato universal.
El sustrato universal, lo encuentras por lo general ya preparado y es la recomendación “de batalla” en los viveros y centros de jardinería.
Sobre la marcha puedes ir explorando diferentes combinaciones que puedan mejorar la calidad de los cultivos, e incluso, intentar la preparación en casa de tu sustrato.
Abono: El alimento de la tierra
Con el crecimiento de las plantas y el riego frecuente, el sustrato va empobreciendose poco a poco, perdiendo su aportación nutrimental y aquí es donde el abono periódico nos ayuda a reponer los nutrientes perdidos.
Así como con los sustratos, podemos encontrar muchas variedades de abonos.
Y si buscamos que nuestro huerto en casa sea además un huerto orgánico, libre de agrotóxicos, entonces será mejor evitar los fertilizantes químicos y en su lugar usar abonos orgánicos.
El abono orgánico es una mezcla resultante de la descomposición natural de materiales de origen vegetal y animal, la cual tiene la capacidad de mejorar la fertilidad del suelo.
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Los agricultores orgánicos recomiendan abonar la tierra cada cambio de temporada, con alguno de los siguientes abonos orgánicos:
- Composta casera o industrial
- Humus de lombriz
- Estiércol de animales
- Guano
- Cenizas de madera, entre otros.
Lo más común en cada cambio de temporada es aplicar un poco de humus de lombriz o composta sobre la superficie del sustrato.
Cómo preparar el suelo para un huerto en casa
Si decidimos plantar directamente en el suelo, lo primero que tenemos que hacer es:
- Tomar 3 o 4 semanas de anticipación antes de comenzar a plantar.
- Remover la tierra del área seleccionada para la huerta hasta una profundidad de poco más de 20 cm.
- Retira piedras y malahierba, dejando el espacio lo más limpio y parejo posible.
- Recubre el área con el sustrato universal, y si lo deseas, puedes mezclarlo con algún abono orgánico para mejorar la calidad de la tierra.
- Haz filas para plantar, procurando que estas estén a aproximadamente 30 cm de distancia y tengan unos 20 cm de ancho.
Cómo preparar el sustrato para los contenedores del huerto en casa
Las macetas, jardineras y otros recipientes similares requieren solamente de llenarlos del sustrato y están listos para plantar.
Las mesas de cultivo, huacales y cajas de cultivo, requieren:
- Recubrir fondo y paredes interiores con malla antihierba o plástico grueso, para evitar que la tierra salga por los orificios.
- Asegurar que después del forro interior, el drenaje sea el adecuado. De ser necesario, hacer pequeños orificios en el fondo.
- Rellenar con el sustrato universal y abono orgánico.
Paso #4: Decide qué plantar en el huerto
¿Con qué plantas iniciar el huerto en casa?
De entrada para comenzar con el huerto casero, lo más sencillo es comenzar con hortalizas y con plantas aromáticas, ya que estas son las más sencillas de cuidar y su crecimiento es relativamente corto.
Algunas plantas a considerar son para el arranque del huerto en casa son:
Hortalizas | Aromáticas |
---|---|
Acelga | Albahaca |
Betabel | Epazote |
Brócoli | Tomillo |
Chile | Hierbabuena |
Col | Mejorana |
Coliflor | Menta |
Espinaca | Orégano |
Jitomate | Romero |
Lechuga | Ruda |
Rábano | |
Zanahoria |
Recuerda, ubicación, ubicación, ubicación
Es necesario siempre colocar las plantas de acuerdo a sus necesidades de luz, riego y espacio para crecer.
Puedes ver algunos tips para elegir plantas aquí.
La jardinería no es una ciencia exacta.
Hay muchos factores que afectan a las plantas y una vez en tu casa, necesitan ajustarse a las condiciones específicas de tu huerta o jardín.
Usa la siguiente referencia para darte una idea general de las condiciones de luz y el espacio que algunas plantas requieren, si es que optas por usar macetas o algún contenedor para plantarlos.
Considera su ciclo natural de crecimiento
Hay muchas plantas que pueden cultivarse durante cualquier temporada del año, y hay otras que solo crecen en determinadas estaciones.
Es importante conocer cuales son las plantas de temporada en nuestra locación, para que de esta manera podamos aprovechar mejor el ciclo natural de crecimiento de la planta.
Cuida de darles espacio para crecer
Hemos hablado que las raíces necesitan espacio suficiente para crecer, y para variar, las raíces de las plantas pueden ser de diferente tamaño, por lo que a la hora de plantar es importante considerar:
- la profundidad a la que hay que plantar la semilla o brote.
- la distancia entre plantas
- el volumen mínimo del contenedor (para el caso de usarlos).
Consulta la siguiente Tabla de Cultivo que he preparado para ti, donde podrás ver las necesidades específicas para algunas de las plantas y te ayudará a decidir qué plantar de acuerdo a la estación del año.
Paso #5: ¡A sembrar!
Ya que conoces todos los pormenores para construir un huerto urbano y tienes a la mano todo lo vas a necesitar, sigue estos sencillos pasos comenzar a plantar.
1. Germina tus propias semillas
Para comenzar a plantar en tu huerto casero, no necesitas comprar semillas, puedes tomar lo que ya tienes en el refrigerador y de ahí partir.
Verduras con semillas
Revisa lo que consumes usualmente y toma aquellas verduras que contengan semillas, como pueden ser: el tomate, chile, pimientos, pepino, calabacita o limón.
- Retira con cuidado las semillas de la fruta que quieras germinar.
- Lavalas con cuidado.
- Llena un contenedor pequeño y con drenaje con sustrato.
- Colócalas encima y cubre con otro poco de tierra.
- Humedece el sustrato y riega diariamente.
- Aproximadamente 1 o 2 semanas después y cuando hayan alcanzado entre 5 y 10 cm, tendrás listas tus plantitas para el trasplante.
Hortalizas y verduras sin semilla
Puedes realizar este procedimiento con zanahorias, betabel, apio, lechuga, espinaca, rábano, cebolla, ajo (y con el hueso del aguacate).
- Corta la base de la verdura a unos 7 cm de su base.
- Coloca palillos y sostenlo en la boca de un recipiente con agua, procurando que sólo un 1 cm de la parte inferior quede sumergido.
- Colócalo en un sitio bien iluminado
- Después de una 1 o 2 semanas, notarás que algunas nuevas hojas y raíces han comenzado a crecer.
Hierbas aromáticas
Toma un manojo de tomillo, albahaca, cilantro, epazote o hierbabuena de tu refrigerador.
- Corta una rama diagonalmente de aproximadamente 10 cm de largo.
- Remueve las hojas de la base.
- Coloca la base en un recipiente con agua y espera a que crezcan las raíces.
2. Trasplanta a tu huerto casero
Una vez que ya tienes los brotes, necesitamos trasplantarlos a el lugar que hemos designado para cada uno de ellos, tomando en cuenta sus necesidades de luz y espacio que repasamos antes.
- Haz un hueco en el sustrato usando la palita.
- Remueve el brote desde el contenedor con tierra, o simplemente coloca el brote en su nuevo lugar.
- Rellena de sustrato alrededor.
- Humedece lenta y suavemente.
3. Ten en cuenta la asociación y rotación de cultivos en el huerto
Cuando comiences a plantar toma en cuenta lo que los agricultores expertos llaman asociación de cultivos.
No es otra cosa que cuidar de no plantar de manera consecutiva (en una misma área en suelo, o en un mismo contenedor) plantas de la misma familia, o aquellas que sean del mismo “tipo” (de raíz, de hoja, o fruto).
La razón es porqué al tener plantas similares juntas, ellas podrían estar “compitiendo” por los mismos tipos de nutrientes en el suelo, y tener un crecimiento deficiente.
Para realizar una adecuada asociación de cultivo se requiere mezclar familias o tipos de plantas. Se recomienda plantar las hortalizas junto con otras plantas con flores, aromáticas y cualquier otro tipo de planta.
La rotación de cultivos es algo similar. Consiste en procurar alternar el suelo usado con diferentes plantas para tratar de balancear el desgaste del mismo.
Por ejemplo, si un año se plantó una espinaca, la cual es muy exigente de nutrientes, el siguiente año, puedes plantar chícharo o garbanzo en ese lugar, el cual al demandar diferentes nutrientes ayuda a compensar el desgaste del suelo.
Paso #6: Cuida del huerto en casa
Los cuidados del huerto y del jardín son básicamente los mismos.
- Una de las tareas recurrentes es el riego.
Toma en cuenta las necesidades particulares de cada planta y recuerda no excederte.
Usa uno de tus dedos para verificar la condición del sustrato y en caso de estar seco, riega, de lo contrario espera. - Arriba mencionamos el abono periódico.
Prográmate para hacerlo en cada cambio de temporada y durante el crecimiento de las plantas observa si hay algún cambio en la coloración o algún otro indicativo de crecimiento anormal.
Esto pudiera ser a causa de alguna carencia de nutrientes en la planta y por ende, deberás aplicar abonos específicos según sea el caso para ayudarla a recuperarse. - Y finalmente, observa con detalle las plantas de manera regular, en busca de plagas o alguna otra enfermedad.
Revisa los tallos y las hojas, y de identificar alguna condición de riesgo, actúa de manera oportuna, aplicando de preferencia remedios orgánicos para combatirlas.
Revisa los errores más comunes del cuidado del jardín, para evitarlos en tu huerta en casa.
¡Disfruta de tus cultivos!
Espero que con la información que recopilé para tí en esta guía sobre cómo hacer un huerto urbano en casa, puedas impresionar a más de dos con tus cultivos orgánicos.
Déjame abajo en los comentarios si esta guía te gustó y platícame tus experiencias con este nuevo proyecto en casa.
Referencias:
Guía para elaborar un huerto en casa, Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de México.
Guía de huertos urbanos familiares, Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de México.
Una huerta para todos, manual de auto-instrucción, Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura.
Manual de huertos sostenibles en casa, Diputación de Alicate.